Un encuentro con Jesucristo a la intemperie
«Con esta misma idea Dubos20 interpretó el concepto de salud en un sentido ecológico: pensaba que la vida implica la interacción y a la vez la integración de dos ecosistemas: el medio interno y el medio externo. Por un lado el organismo, cuyas células, fluidos y estructuras tegumentarias están relacionadas entre sí mediante una compleja red de mecanismos de equilibrio, y por el otro, el medio externo está sujeto a cambios que acontecen en ocasiones de manera impredecible; muchos de estos cambios que ocurren en el ambiente externo pueden causar efectos dañinos en el hombre, por lo que en el organismo se generan cambios adaptativos para funcionar de manera eficiente y conservar la vida. Cualquier factor que rompa el equilibrio entre estos dos sistemas ecológicos puede ser causa de enfermedad…
Una de las particularidades de la medicina helénica es considerar el cuerpo humano de manera integral: relaciona el todo con cada una de sus partes y con el entorno mismo; parece que esta percepción daba sentido a los conceptos de salud y enfermedad. Consideraban la salud como un fenómeno de armonía y proporción, no como producto de las cualidades de la materia, sino como equilibrio de las fuerzas y por la mezcla de los componentes corporales, y sus interrelaciones, y todo esto como respuesta del organismo a los estímulos del ambiente.
Contemplaba al hombre dentro de su entorno físico y social, lo que explica porque ubicaban la salud y la enfermedad en este ámbito, pero sin desatender las situaciones particulares, siempre cambiantes. Por eso se piensa28 que uno de los legados más valiosos de la medicina griega es lo concreto, en su connotación latina (concretus: lo que crece junto, no lo aislado o separado), que permite adivinar el «juego inmenso de las relaciones del sujeto y su mundo, sobre esto versa la observación del médico». Fin.
Son fragmentos que escogemos del texto: «Ideas, creencias y percepciones acerca de la salud» de Leopoldo Vega Franco
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