Un encuentro con Jesucristo a la intemperie
Publicado el 9 noviembre, 2020 por desiertoanawim
«Y a los 31 años de mi edad empecé a morir viviendo y a vivir muriendo, una vida tan horrorosa a mi vista, tan amarga, que me horripila mis carnes al escribirlo…
Para venir a gustarlo todo, no quieras tener gusto en nada.
Para venir a saberlo todo, no quieras saber algo en nada.
Para venir a poseerlo todo, no quieras poseer algo en nada.
Para venir a serlo todo, no quieras ser algo en nada.
Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa, Dios no se muda,
La paciencia, todo lo alcanza, quien a Dios tiene, nada le falta.
Sólo Dios basta.